29.12.06

Descansa en paz

¿Qué es la muerte? ¿Puede ser algo tan poderoso que nos incita a conocerla antes de nuestro turno?

Hoy dejo mi particular sentido del humor de lado para hacer un pequeño homenaje a quien ha querido pasar la frontera. La verdad es que no me apetece escribir, pero ante la imposibilidad de derramar lágrimas, éste es el único método que encuentro adecuado para saciar mi nervio.

Creo que ha sido la tercera oportunidad para esto y al fin lo has conseguido. No te quiero reñir, ni tampoco decirte que me ha parecido mal. No estoy enfadada ni nada similar, pero tampoco te felicito por haberlo logrado. Te respeto y si lo has hecho convencida que allí estarás mejor, me alegro.

Lo que se ha vivido hoy no es nada agradable de normal, pero mucho menos con los generosos alicientes de las circunstancias. Pocas veces he asistido a actos similares, pero las lágimas que no he derramado hoy, mi corazón las ha sentido. Dicen que una gota de sangre mueve más que cualquier otra cosa y es verdad. Caprichos del destino, has esperado a que se hayan arreglado otros asuntos para poder decirte hasta luego todos unidos.

Desde aquí y sin saber si te enterarás de esto, tan sólo me queda decir que sólo recordaremos los buenos momentos. No te podemos ni acusar ni recriminar nada de lo anterior, como se ha dicho, lo que se debe hacer es tratar con cariño porque tenemos la misma sangre en las venas. Por otra parte, agradecer esta unión que esperemos dure.

Siento ser poco coherente, sé lo que me digo y sé que me comprendes.

SLPS

16.12.06

Madrid, Madrid, Madrid...

Pasados dos días de la vuelta de nuestra visita al Tribunal Constitucional, se me ocurre hacer un pequeño resumen de lo sucedido allí, que no es poco.

Con la licencia de saltarme los actos preparatorios (no punibles, por cierto) haremos un rápido recorrido hasta Aranjuez, donde el viento barría hoy las hojas secas sin color, pero antes un inciso para comentar el pequeño comentario macabro del amantísimo subdelegado de nuestra clase "Ehh! ¿Sabéis que vamos a descarrilar?". Comentado esto puedo proseguir con la venia del espectador.

En algún lugar del recorrido el tren chirrió y, ante las caras atónitas de todos, quedó parado sin que nadie nos dijera nada de por qué. La mujer sentada delante de quien soltó tal perla dijo "niño, eres un cenizo" y ya, por fin, después de esperar un poco, una voz por megafonía nos avisó que, por problemas técnicos, debíamos hacer un transbordo y poco faltó para que continuara diciendo "y apáñense usías la vida". Estupefactos y desconcertados bajamos del tren cuando paró en la estación más cercana como si de un aviso de bomba se tratara y siguiendo al personal fuimos a un aparcamiento donde vimos cómo un autobús (el autobús) salía cargado de pasajeros más rápidos que nosotros. Supimos que era Aranjuez no porque nos lo dijeron sino por un coche de policía local que había al lado nuestro. Se acercó el caballero de Renfe y nos dijo que no sabía cuándo vendría otro, que la solución alternativa era coger 2 trenes y un autobús intercalados para llegar a Atocha. Mientras estábamos esperando nos enteramos que el autobús cayó sobre las 4 de la tarde. Eran las 7 de la tarde y no habían sido capaces de planificar nada para 3 horas más tarde, sabiendo que llegaría un tren de largo recorrido con más de 60 personas dentro, justo las que cabían en el bus que salió anteriormente.

Entramos corriendo de nuevo a la estación junto nuestras maletas para coger el tren que se dirigía a Valdemoro, para luego coger un urbano con dirección Pinto y de allí otro cercanías con dirección Atocha. Sí, el camión estrella de la tarde cayó entre Pinto y Valdemoro (y mira que es complicado esto) para amenizarnos la tarde y evitar que el nuestro fuera un viaje aburrido. Una vez en Pinto, el autobús quiso hacer una maniobra "peligrosa" -peligrosa porque un coche corría el riesgo de perder su trasero y una esquina de ser redondeada- y tras unos minutos de esfuerzo, en los que pensamos que sería mejor bajar del autobus, levantarlo de atrás y girarlo nosotros mismos, logró conseguir dicha hazaña. Bajamos cerca de la estación y cogimos el tren como si de una pareja enamorada se tratase, corriendo el uno hacia el otro, a excepción del tren, que no se podía mover.

¡¡¡Por fin ya estábamos en Atocha!!! 2 horas más tarde, pero ya estábamos en Atocha!! Donde, supuestamente nuestro estado de nervios se calmaría -ja, ja, ja-. Vino un amigo a recogernos y hacernos de guía por Madrid y nos llevó al hotel donde por fin pudimos sentarnos un poquito a descansar. Nos invitó a dar un paseo por Madrid y allá que fuimos: Congreso, Senado, algunos Ministerios, Puerta del Sol, Ateneo, Monumento a las víctimas del atentado a Alfonso XIII, Callejón del Gato...

De vuelta al hotel pensé que dormiría tranquila porque se acabó mi aventura (no sentimental, que quede claro). Subí a la habitación y estaban mis compañeras mirando al televisión. Me puse el pijama y estuve hablando con ellas un ratillo. Cerré los ojos y al poco tiempo sonó el despertador.

Nos levantamos con ilusión y terminando de arreglarnos sonó el teléfono con una invitación para subir en un taxi y compartir viaje. Muy a nuestro pesar llegamos tarde a la cita, aunque nos estaban esperando todavía. Nerviosas porque ya se nos hacía tarde ocurrió el milagro. Apareció ante nosotras un taxi con un taxista educado y con principios morales que nos llevó en menos que canta un gallo a nuestro destino, llegando 2 minutos antes de lo previsto y por lo menos, pudiendo así respirar hondo y ahora reirnos de nuestro pequeño estado de nervios.

Al salir de la visita ya fue todo normal, fuimos a comer a una crepería, volvimos a Atocha a hacer pequeñas compras y al tren, esta vez sin sorpresas.

Si me permitís me encantaría agradecer a los organizadores esta actividad en la que, además de hacer crecer nuestro instinto de supervivencia, ha ayudado a conocernos mejor los asistentes. Un pequeño hueco aquí también se merece la farmacéutica amable que nos guardó las mochilas durante la visita.

¡Un saludo y hasta la próxima!

15.11.06

Es indignante!! (quéjate, yo también lo hago)

Y no, no me refiero al poco tiempo del que dispongo para escribir en el blog, aunque cabría esta posibilidad. Me refiero a 2 cosas, por una parte a la frase más repetida esta mañana y esta tarde en clase, unas veces más irónicas, sarcásticas e incluso satíricas que otras y por la otra al comportamiento que mis amigos del taller de coches tienen con mi vehículo.

La historia del coche yo pienso que es más para escribir un best seller que no un blog, son casi 3 meses de reparaciones contínuas (para mi gusto, gratuitas, pero para mi disgusto, no me dejan disfrutar de mi coche) en las que no han dado con el error que tiene (ni siquiera después de pagar los 600€ de la primera reparación) y es más, después de estos meses, en los que empiezo a pensar que uno de los mecánicos está haciendo su tesis doctoral sobre el eje del palier de mi ford fiesta, me dan la... no sé si poner increíble o inaudita noticia que me van a hacer pagar de nuevo la caja de cambios puesto que es un posible mal que hasta ahora no habían caido en investigar.

Después de pedirles una hoja de reclamaciones antes que acabe mi paciencia, me han montado tal cirio que incluso me veo en la obligación de pedirles perdón por llevar mi pequeño utilitario 5 veces (por ahora) al taller, estando allí unos 10 días de media si no son más. ¡Qué gracioso! Encima de no poder usar tu propio vehículo, te riñen porque ni siquiera ellos han sido capaces de realizar bien su trabajo.

Ojalá fuera esto como en algunos comercios "Si no queda satisfecho, le devolvemos su dinero". Si se vieran obligados a devolver el precio de las reparaciones tras mostrar su ineficiencia, el taller funcionaría mejor. Resulta paradójico, ¿verdad?

Lo otro que me parece indignante es la reiteración de dicha frase esta mañana en el aula. Tras los esfuerzos de una profesora que se desvive por sus alumnos y nos, porque me incluyo, prepara actividades que ni siquiera muchos de los mejores juristas han tenido el privilegio de disfrutar, tan sólo se le ocurre decir que "es indignante" que se basen en criterios académicos y una entrevista personal a los solicitantes para completar el cupo establecido por los propios organizadores de la actividad. Bajo su criterio, sería mejor hacer un sorteo en el que igual le toca, tanto a ella como a otras personas que se apuntan por probar suerte y por pasar una noche de "movida madrileña", mientras que otras personas que se interesan por la materia e incluso sueñan con trabajar algún día allí se quedan en tierra porque unos niños de su papi y su mami se lo están pasando "chupiguay" en la Capital del Reino, saliendo de fiesta un jueves por un lugar que no sea Lagasca y yendo a un "superjuzgado que te cagas". Es más, tras cortar por lo sano e insinuar cierta rebeldía, no se les ocurre otra cosa que añadir a la reprimenda "sí, pero las cosas han evolucionado".

No sé si es porque les saco algún año que otro (que por cierto, el viernes será uno más), por las contínuas enganchadas que hemos tenido en otras asignaturas y no tengo ganas de recordar, porque mi forma de ser y ver las cosas no es tan "rosa" como la suya, o por que no me parezco en más de mil aspectos a ellos; pero sigo sin ver razonamiento alguno a sus actitudes y exigencias ante el profesorado.

Concluyendo, que es geranio (como los de la maceta de un compañero), sin acritud y, sobretodo, sin ganas de meterme más aún con ellos, lo verdaderamente indignante es el poco respeto que se tiene, en unos casos a quienes nos tenemos que enfrentar en los exámenes, en otros casos quienes tienen cierta ventaja sobre nosotros. También hay que recordar que aunque la universidad no es lo que era, porque entre otras cosas ya no están los bedeles anunciando el inicio y el fin de las clases, la educación debe venir de casa.

PS: Aunque lo parezca por la temporalidad de la situación, no es venganza sino legítima defensa.

3.11.06

¿Hipocresía migratoria?

¿Habeis pensado qué tienen los extranjeros que a veces nos gusta o a veces no?

Imaginad algunas de las ocasiones:

- En los centros de educación primaria públicos, los niños españoles cada vez son menos habituales porque sus papis los borran y los llevan a colegios concertados porque los públicos se infestan de niñitos de otros países

- Nos quejamos de la política en inmigración que hace Zapatero al regularla. 1 vez y les ha pedido contratos de trabajo, acabó el plazo y se cortó el chorro. Investigad las regulaciones efectuadas en la legislación anterior... si no me equivoco hubo 3 en las que no tenían que llevar nada como muestra de su pacífica residencia y otros requisitos previstos en nuestra legislación...

- Vemos alterados el problema de las pateras. Incluso oí en algún lugar que nos invaden los de por allá al sur... (otro tema interesante para poder debatir). Sabemos lo que pasa en aquellos lares? Tienen una sequía terribe y ni siquiera el grano y productos de secano son cultivables.

Sin embargo:

- Los grandes ídolos del futbol son extranjeros: Ronaldinho, Beckham, Etoo, Ronaldo, Roberto Carlos (y no escribo más proque no me gusta el fútbol y apenas conozco jugadores). Pensad si quereis en actores o músicos extranjeros asentados en España, igual hasta para alguno le hemos regalado la nacionalidad para obtener algún fin (pero eso es otro tema)

- Todos se quejan de los rumanos, colombianos y demás "-anos" o "-ies" que se os ocurran, pero está la típica vecina que los critica a más no poder pero que te ofrece el teléfono de su "chica rumana" por si quieres que te preste sus servicios de asistenta

- Preguntad a cualquiera si le dan a elegir entre un español o alguien de otro lugar. Por ejemplo, a un hombre se le da a elegir entre una brasileña y una española. O en el mundo de la prostitución... ¿con quién se irían antes?

Antes de responder... recordad que en etapas anteriores nosotros también emigramos para buscar mejor fortuna